martes, 11 de mayo de 2010
INTRODUCCIÓN AL CASO LA CARTOGRAFÍA EN EL SIGLO XV ¿CÓMO ERAN CAPACES LOS CARTÓGRAFOS DE REALIZAR MAPAS Y PARA QUÉ?
martes, 27 de abril de 2010
CARTOGRAFIA EN EL SIGLO XV
La cartografía seguía con paso ágil las noticias de los descubrimientos ya que la aportación de noticias acerca de nuevos territorios ocupaba el tiempo y los esfuerzos de los cartógrafos para reseñarlas en una perspectiva universal.
La Ciencia Española en el Siglo XVI estuvo íntimamente ligada a los problemas de la navegación.
Desde la Baja Edad Media se utilizaba la brújula en la navegación por el Mediterráneo y se fijaban rumbos muy precisos en la navegación por este mar en el s. XV.
Las cartas utilizadas eran los “ Portulanos”. Eran cartas náuticas que tuvieron su apogeo en los siglos XIII-XVI.
Hasta el desarrollo del “portulano” no se puede hablar de mapas propiamente dichos.
En el siglo XIV y XV destacan la escuela Mallorquina y la Italiana Pero en el siglo XVI, la superación del ámbito mediterráneo, los nuevos descubrimientos y las nuevas técnicas imponen una nueva cartografía a la que, en general no se adaptaron los autores mallorquines. Aunque continua la producción de cartas náuticas el producto principal son los atlas.
La Carta Universal de Juan de la Cosa , fechada en 1500, año en que se inicia el gran siglo del reinado de Carlos V. Fue en su tiempo la precursora de la gran expansión americana durante el reinado del Emperador. Esta pintada sobre pergamino, en dos piezas unidas. Fue trazada por Juan de la Cosa en el Puerto de Santa María. Reúne la representación de todos los conocimientos geográficos de la época, reseñándose ya en ella los descubrimientos realizados por Colón en sus viajes de 1492, 1493 y 1498, los de Ojeda y Vicente Yáñez Pinzón, así como los de Sebastián Caboto en América del Norte. Figuran asimismo, las costas de América del Sur desde el Cabo de la Vela al de San Agustín y una parte de Brasil.
Muy ricamente decorada, la Carta también recoge prolijamente los descubrimientos portugueses en África y la información más moderna de los portulanos mallorquines e italianos, introduciendo toda la ornamentación tradicional de éstos, como naos, carabelas, reyes africanos, personajes bíblicos y representaciones míticas, con gran profusión de rosas de los vientos y banderas.
Tras ser presentada a los Reyes Católicos, la Carta fue depositada en la Casa de de la Contratación de Sevilla.